Ambos conflictos navales en La Rochelle suceden en el contexto de la Guerra de los Cien años, el primero en apoyo a Francia y el segundo para defender los intereses comerciales que la corona castellana había logrado tras la primera victoria.
¿Por qué se inició la Guerra de los Cien años?
La Guerra de los Cien Años, nombre dado a este periodo por la historiografía decimonónica, se inició debido a la disputa dinástica por los derechos sucesorios de Carlos IV de Francia y I de Navarra, conocido como “el Hermoso“. Carlos fallecería en febrero de 1318 y las disputas sucesorias estallarían hacia 1337.
El desencadenante principal fue que, Eduardo III de Inglaterra, siendo su madre Isabel Montimer de Francia (hermana de Carlos IV de Francia) por lo tanto descendiente de Felipe IV de Francia, anterior rey, podía reclamar el trono de Francia, pero fue descartado al descender por vía materna.
Este enfrentamiento por el control de los territorios de la actual Francia finalizaría en 1453 tras varias derrotas consecutivas del ejército inglés. La guerra terminó sin ningún tratado de paz, simplemente los ingleses se retiraron a las Islas; aunque mantuvieron la ciudad portuaria de Calais, hasta 1558.
Batalla de La Rochelle de 1372
Antecedentes
Dentro del periodo de la “Guerra de los Cien Años” se firmaron varios tratados de paz, uno de ellos fue el Tratado de Brétigny (o de Calais), en octubre de 1360.
Por este tratado, el rey Juan II el Bueno era puesto en libertad entregando casi un tercio de Francia a los ingleses. También se le reclamó una enorme suma de dinero que no pudo pagar y tuvo que regresar a su prisión en Inglaterra para evitar la una nueva invasión de Francia.
Este tratado de paz sirvió a su sucesor, Carlos V de Francia, a reorganizar y reconstruir el reino antes de que volvieran a tratar de atacar Francia.
Se suele afirmar, que Carlos V de Francia fue el que reanudó las hostilidades con Inglaterra violando el Tratado en 1369; pero la realidad es que Inglaterra apoyó al reino de Navarra, de Carlos el Malo, en 1364, en una invasión desde Normandía a los territorios en posesión del rey de Francia. Salieron derrotados y Francia fortalecida.
Los contendientes
Tras haber apoyado Francia al bando vencedor, el de Enrique II de Castilla (en la primera guerra civil castellana) éste le debía apoyo naval en las operaciones que necesitase.
Una de las estrategias para recuperar las ciudades de Francia, por parte de Carlos V, era la de asediar una por una las plazas fuertes. Fue el caso de La Rochelle, a la cual puso sitio el 22 de junio de 1372.
Las características de la ciudad permitían el hostigamiento por mar, por lo que solicitó la ayuda de la Armada Castellana. El rey de Castilla envió 22 galeras, a las que se le unirían en Santander algunas unidades francesas, pero nunca llegaron. Por lo que del puerto cántabro salió la flota al mando del almirante Ambrosio Bocanegra.
Según Froissant:
Sus patrones y soberanos eran Ambrosio Bocanegra, Cabeza de Vaca, don Fernando de Pión y Ruy Díaz de Rojas.
Aunque las fuentes difieren, se suele afirmar que la flota inglesa estaba compuesta por 36 navíos y 14 buques de transporte. Al mando estaba Jean de Hastings, conde de Pembroke.
El combate
Los barcos ingleses estaban fondeados cerca del puerto. A pesar de su inferioridad numérica, el almirante castellano atacó a la flota inglesa.
Tras un pequeño enfrentamiento con los ingleses, Bocanegra fingió una retirada. El engaño funcionó: Jean de Hastings, creyó que la flota castellana estaba a su merced. Pero la estrategia de Ambrosio Bocanegra fue bastante diferente, el almirante castellano era consciente de que las grandes naves inglesas, todas muy cargadas, no podían moverse con la marea baja, y decidió esperar.
En la madrugada del 23 de junio de 1372, durante la bajamar, la flota castellana apareció en las cercanías de la Rochelle de nuevo, pero el gran calado de las naves inglesas hizo que quedaran varadas, y antes de que subiera la marea, los castellanos comenzaron a lanzar proyectiles incendiarios contra ellos.
Las embarcaciones inglesas comenzaron a arder. Uno tras otro, los barcos eran enviados al fondo, incluido el que llevaba el que llevaba la paga de 3,000 mercenarios durante un año. Algunas naves pudieron escapar del fuego, pero rodeadas por todos lados, fueron capturadas.
Varias fuentes actuales afirman que en aquel combate se usó artillería, posiblemente de carácter ligero como alguna bombarda. En las fuentes medievales hacen referencia a flechas incendiarias y a una especie de proyectiles incendiarios compuestos de sebo y aceite que se arrojaron (sin especificar cómo) sobre los navíos ingleses.
Al finalizar el combate, el conde de Pembroke, fue hecho prisionero por los castellanos, junto a 400 caballeros y 8,000 soldados.
Batalla de La Rochelle de 1420/1419
El año. ¿1419 ó 1420?
Según indica la Tesis Doctoral de Manuel Flores Díaz, aparecen en los “Anales Breves de Vizcaya” (p. 143) la siguiente referencia:
A XXX días de desiembre, año de mill CCCC XX (1420), la flota de nuestro señor el rey, de que era capitán Juan de Camporredondo, tomó la flota de Alemania que estaba en La Rochela, e murieron muchos omnes de los de la flota de Alemania.
No obstante, las crónicas alemanas transcritas por Konrad Hábler la sitúan en 1419. Las pocas referencias en los archivos castellanos a este combate dificultan su ubicación en el tiempo.
Antecedentes
Hacia 1415, Inglaterra dominaba las costas de Normandía y pretendían recuperar el poderío comercial naval que les había sido arrebatado tras la derrota de La Rochelle de 1372.
En una batalla naval contra Francia, en 1416, los ingleses contaron con la ayuda de los barcos de la Liga Hanseática. Francia contó con el apoyo castellano, la flota más poderosa del momento, lo que derivó en su victoria.
El rey Juan II, debido al apoyo del Hansa a Inglaterra autorizó el corso contra sus mercantes y publicó una Ordenanza en la que se advertía al Hansa que no hiciera cargas en los puertos de su reino, si no que tomaran las mercancías hispanas en Brujas de las embarcaciones españolas que las llevaban a aquel puerto.
Juan II de Castilla inició además los preparativos para una guerra naval, empezando por una nueva convocatoria de Cortes en las que dijo:
Sepades que a mi son venidas muchas querellas de diversas partes de mis regnos, asy de mercaderos como de otras personas de muchos navios e mercadorias e otras cosas e otras cosas [sic] que les son robados e omes muertos de los ingleses, e aun de cómo dichos ingleses andan por la mi costa de la mar faziendo guerra e robando e damnificando mi tierra e mis subditos y naturales, a aun, otrsy, que en Inglaterra e en Bayona es pregonada guerra por mar e por tierra contra mis regnos.
Otrosy, el rey de Francia, mi muy caro y muy amado ermano, me enbio dezir segund las alianças e cofederaçiones que entre él e mi son, que les to quysiere ayudar por mar contra el dicho rey de Inglaterra que era entrado e estava en sus regnos tomandole çibdades e villas e faziendole la mayor querra que podia.
(…) porque cunple mucho a mi serviçio e al bien de mis regnos fazer la dicha armada contra los yngleses por los males, e daños, e robos que han resçibido e reciben de cada dia los mis subditos e naturales por la mar…
El ataque castellano
A pesar de la tensa situación, el Hansa, envió á Galicia una flota, cuyos buques cargaron artículos de gran valor zarpando hacia finales de diciembre de 1420. La flota estaba compuesta por 40 naves germano-flamencas (de la Hansa) y una escolta de 7 navíos ingleses.
Juan II de Castilla no podía permitir perder posiciones comerciales en el Atlántico y ordenó un ataque sobre la gran flota anglo-hanseática a la altura de La Rochelle. La flota castellana (de unos 20 barcos), al mando de Juan de Camporredondo destruyó a la escolta y capturó 40 barcos cargados de ricas mercancías, vendiéndose todo en el mismo puerto de la Rochela.
Se suele afirmar que este combate fue el primero en que la flota castellana usó buques artillados, aunque esta batalla no aparece mucho en las crónicas y existen numerosas lagunas en torno a ella.
Descubre más desde El Reto Histórico
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.