El Museo Británico ha adquirido un conjunto de más de 100 ilustraciones del maestro japonés Katsushika Hokusai que permanecieron ocultas durante 70 años.
Hokusai, popularmente conocido por su icónica “Gran Ola”, realizó 103 dibujos en 1829 para un libro llamado “Great Picture Book of Everything“, pero por razones desconocidas nunca se publicó.
Sus dibujos preparatorios entintados a mano fueron adquiridos por el joyero francés Henri Verver (1854-1942), uno de los primeros coleccionistas europeos de grabados en madera ukiyo-e, una forma de arte que Hokusai adoptó y transformó.
Aparecieron por última vez ante el público en 1948 cuando se vendieron en una subasta y luego desaparecieron en la penumbra de las propiedades privadas anónimas. La colección volvió a aparecer el año pasado (2019) y el Museo Británico pudo gestionar su compra gracias a una subvención del Art Fund.
Estos dibujos representan una variedad de temas que van desde la mitología, literatura, animales, plantas y paisajes. La mayoría de los trabajos se refieren a temas de la antigua China, India, el sudeste asiático y Asia central, motivos que no aparecen en ningún otro lugar de la obra de Hokusai.
Fueron hechos durante un período de grandes dificultades en la vida del artista. Tenía 70 años y había sufrido un derrame cerebral, había enviudado y estaba al borde de la indigencia debido a las deudas de juego de su nieto. Produjo muy pocas obras de arte durante este tiempo, lo que hace que los dibujos sean aún más significativos.
Tim Clark, investigador honorario del Museo Británico, dijo:
Estas obras son un nuevo e importante descubrimiento que amplía considerablemente nuestro conocimiento de las actividades del artista en un período clave de su vida y obra.
Las 103 piezas están tratadas con la fantasía habitual, la invención y la habilidad del pincel que se encuentran en las últimas obras de Hokusai y es maravilloso que finalmente puedan ser disfrutadas por los muchos amantes de su arte en todo el mundo
Los 103 dibujos y la caja de madera original en la que vinieron se han digitalizado y se podrán consultar en la Colección del Museo Británico en línea en unos días (esperemos)
